Comienza una nueva aventura. Cada día hay que empezar de nuevo. Una ilusión. Un sueño. Ahora para tí, le ha tocado el turno a este espacio: El haber de uno.
En este tiempo dónde quien más, quien menos, se comenta desde la barrera el "apocalipsis" económico cuasi final de nuestros días, catalizado en la palabra tabú: "crisis".
Cuando alguien pronuncia crisis, nuestra mirada se erige firme y directa hacia el horizonte. Nuestra mente evoca momentos de necesidad y no tenemos nada claro si el dicho de "a río revuelto... ganancia de pescadores" se ha cumplido por entero en alguna ocasión. Pero lo cierto es que algunos siempre han estado, están y estarán en crisis, otros no. A un tercer grupo la crisis le viene de perlas, pues suben sus beneficios y aprovechan cualquier recoveco para llenarse los bolsillos.
Podemos concretar que estar o no en crisis es un estado emocional y cómo tal se puede cambiar, o mejor, se debe cambiar, sino al menos de puertas para adentro, sí de puertas para afuera. La imagen que transmitimos también importa.
Han aflorado tantos blogs que muchos ya han anunciado su saturación en la red de redes y vaticinan su desplome o incluso desaparación. En tiempos de reconversión, antes o después nos llegará el turno, pero también es cierto que algunas de las herramientas de las que disponemos en este momento son únicas y deberíamos aprovecharlas al máximo.
El haber de uno, es una nueva bitácora que pretende abordar determinadas situaciones de las que nos podemos aprovechar, simplemente por mantener un contacto. Esta expresión significa el bagaje que uno acumula, esa mochila de conocimiento práctico que todos llevamos y de la que echamos mano de continuo.
No pretendo que se convierta en un espacio dónde alguien venga a escribir ríos y ríos de tinta para llenar su ego, o para su reconocimiento personal: No. El objetivo es ser conscientes de que formamos parte de una red. Somos un nudo más de la misma. El comienzo y el fin de muchas cuerdas, de las que cuando tiran de una lo notamos y aunque transmitamos o no ese mensaje, no permanecemos impasibles (aunque a veces sí lo mostremos).
En ocasiones somos el canal necesario a través del cual se genera un intercambio de información, y de la que no necesariamente debemos ser los creadores o generadores de la misma. Tan importante es tener buenas ideas cómo otorgarles una difusión adecuada y que todos los eslabones de la cadena sientan el calor con la misma intensidad para que la misma se ponga por entero al rojo vivo. O lo que es lo mismo, realizar con éxito un intercambio de tal forma de todas las partes salgan beneficiadas.
El haber de uno, es sobre todo una ilusión, un nuevo proyecto, un experimento, y cómo he dicho al principio, cada día hay que comenzar de nuevo. Lo importante es el conocimiento, su aplicación y la capacidad para llevarlo a cabo de forma correcta en el momento adecuado. No siempre es fácil, ni nadie nació aprendido, pero hay que estar ahí y empaparse con ello.
En este blog se tratarán temas de marketing, de emprendedores, de ventas, de movimientos, pero sobre todo de personas. No son temas baladíes, ni para desdeñarlos pues lo queramos o no estamos en una sociedad de consumo y constantemente nos replanteamos situaciones o posibles ideas que probablemente caigan en saco roto, pues muchas veces ni siquiera las plasmemos en un papel . Mal hecho hay que cambiar eso. Yo te animo lector a que cojas una servilleta de papel, una libreta, una pda o un móvil y esas ideas las plasmes, las difundas, las hagas tuyas y las vendas cómo se merecen.
Dentro de ti hay mucho que enseñar si lo compartes será el haber de todos.
Por lo tanto no se trata de elaborar complicadas infografías (aunque por supuesto que son útiles y necesarias), no se trata de estar a la última en los avances tecnológicos (que desde luego tienen su valor y su interés), tampoco de mostrar lo más estrambótico y repelente para llamar la atención. Se trata de mostrar lo mejor que llevas dentro y para eso no hay mejor manera que sentarse a tomar un café y de forma distendida compartirlo. Por que todos llevamos capacidades e informaciones que tienen su importancia: Aprovechemoslo.
Por último, desde este concepto que comparto con vosotros, no hay diferencias entre particulares y empresas, entre adinerados y pobres, entre comerciales agresivos y parsimoniosas personas que esperan sin dar nada a cambio. Todos consumimos sin excepción. Todos interactuamos sin excepción. Todos somos personas y todos nos merecemos algo mejor.
Chema García